Resumen:
El acelerado mundo actual y su creciente complejidad imponen a las organizaciones nuevos retos que afectan su supervivencia, para lo cual los avances tecnológicos ofrecen innegables ventajas a través del ahorro de costes. Sin embargo, su aplicación genera numerosos problemas, pues, a diferencia de lo que sus fabricantes preconizan sobre la facilidad de su utilización, adecuarse a estas tecnologías demanda procesos de aprendizaje de las personas encargadas que ralentizan su efectividad. Frente a esta situación, a las organizaciones les resulta más rentable la externalización —offshore outsourcing— de ciertos servicios o procesos de negocio.