Resumen:
El presente trabajo, de talante polémico, descarta la oposición entre inmanencia y manifestación, recupera la percepción como ámbito plenamente semiótico y pone énfasis en la semiosis como mediación corporal. El cuerpo propio aparece así, entrelazado con el lenguaje, como plano de inmanencia de la semiosis. Se crean entonces las condiciones teóricas para proponer cuatro modos de inmanencia semiótica y para probar su coherencia y consistencia en el análisis de un texto concreto; asimismo, para precisar las tesis sobre la práctica enunciativa y sobre la ampliación fenomenológica de la semiosis como inmediación carnal. A guisa de colofón, se interpretan algunos aforismos que convierten la textura carne-cuerpo-lenguaje en el plano de inmanencia semiótico dentro del cual todo hace sentido.