Resumen:
La educación es tanto un bien público como privado. Los países con niveles más altos de educación también son los más prósperos, seguros y pacíficos. Pero también es uno de los principales vehículos de movilidad social individual. Nuestro país no es una excepción y diversos estudios muestran que a más años de estudios, mayor es el ingreso percibido. Sin embargo, esta generalización obvia un hecho fundamental: el retorno a la inversión educativa depende fuertemente de dónde se estudia.