Resumen:
De Prolima (que debería ser el órgano encargado del Centro Histórico en el ámbito municipal) se tienen pocas noticias. Y su página web no ha sido actualizada hace dos años. Mientras tanto, el Centro Histórico se cae a pedazos.
El Centro de Lima –y, por ende, el Centro Histórico de Lima– merece más atención de las autoridades. Su municipio parece más interesado en Lima Metropolitana que en ocuparse del viejo casco central, y cuenta con muy poca voluntad para actuar.
Ha tenido que ser el Ministerio de Cultura –que preocupado por la inacción municipal teme que la Unesco pueda retirar a Lima de la lista de patrimonios mundiales– el que realice la formación de un grupo de trabajo para consensuar y proponer acciones para la recuperación del Centro Histórico. También está tratando de elaborar un nuevo plan urbanístico, instrumento del cual carece desde el 2010, cuando venció el plan del 1998.